La regla de la mirada

Otra de las reglas más básicas dominadas por profesionales y aficionados es la famosa regla de la mirada. Esta nos es útil para componer la imagen de forma correcta dándole una lectura natural y correcta a la imagen. Se puede aplicar cuando el sujeto o modelo no está viendo a la lente de la cámara sino que ubica su visión en otro punto.  La idea es recargar al sujeto al lado opuesto al que observa y dejar el espacio más libre hacia la dirección de su mirada. Si no se usara esta técnica difícilmente quede bien la fotografía pues interrumpes el flujo de la mirada del modelo, es como si se pusiera una pared que limita el ambiente que genera la fotografía.